Los habitantes de grandes ciudades paraguayas, principalmente del departamento Central y en especial de Asunción, deberían pensar en modificar sus plegarias en casos de alertas meteorológicas sobre copiosas precipitaciones. La nueva oración del transeúnte sería algo así como… “libranos Señor del raudal nuestro de cada lluvia”. De hecho, hoy, jueves, calles y avenidas citadinas volvieron a inundarse y los bomberos estuvieron sumamente activos rescatando gente de entre las nómadas y erráticas correntadas capitalinas.
INUNDACIONES, EN MINUTOS
Todo comenzó poco después de las 07:30 y después el diluvio hizo su “Show”. En minutos, calles y avenidas volvieron intransitable y trampas peligrosas a causa de raudales que iban dejando a su paso vehículos descompuestos, personas atrapadas y conductores intentando resguardarse del temporal en distintas arterias capitalinas y del área metropolitana.
BOMBEROS CONTRA EL AGUA
Aunque suene bien irónico, hoy los bomberos voluntarios no enfrentaron peligrosos incendios sino a impetuosas y furiosas corrientes de aguas desbordadas que exigieron salvatajes en distintos puntos Central, por ejemplo, en Luque, donde la Cuarta Compañía, en respuesta a un llamado al 132, acudió las calles Nanawa y Leonismo Luqueño para rescatar a muchos atrapados en vehículos.
Otro rescate estuvo a cargo de la Primera Compañía de Asunción donde personas asediadas por raudales, sobre la calle Teniente Máximo Caballero y Margarilla de Youville del Barrio Ytay. Y como no hay primera sin segunda, la Compañía 2 también tuvo su acto de heroísmo sobre Molas López e Itapúa, en el vértice fronterizo del Barrio Trinidad, donde un fue auxiliado en el lugar.
También el servicio de control de tránsito a través de semáforos fue afectado de manera indirecta, por los cortes de energía que dejaron fuera de servicio a varios de estos señaleros.